Por medio de esta meditación redescubres a tu niño interno. Observar tu pasado te liberará de limitaciones y te dejará sintiéndote ligero.
Despierta al niño feliz dentro de ti con una experiencia integrada de meditación, trabajo respiratorio y vibración sonora. Abre tu consciencia a los preciados regalos del asombro, la inocencia, la alegría y la confianza propios de un infante.
Esta experiencia de apenas 3 minutos te entrega la llave hacia la calma para cualquier situación de la vida. Practícala diariamente o siempre que la precises cuando una circunstancia estresante se presente.
Una contemplación poderosa que te hará conocer la mejor versión de ti mismo. Es un paso fundamental para encontrar una mayor paz en tu interior.